Siempre es la misma historia cuando se acerca el final del curso escolar.
La primera idea que se te viene a la cabeza es tirar de tu madre o tu suegra, entonces te das cuenta que ya pasa de los 80 años y que al tercer día puede estar la mujer para que le dé algo. Idea descartada.
Quieres ofrecerles unas buenas vacaciones, pero también necesitas una opción segura y enriquecedora para ellos. Entonces surge la siguiente pregunta: ¿Dónde los puedo llevar?
Buscas un lugar donde no solo estén bien cuidados, sino que también se diviertan, aprendan y aprovechen al máximo el verano. ¿Será que habrá algún lugar donde puedan divertirse y aprovechar el tiempo aprendiendo algo?
Como padres nosotros también nos hemos hecho las mismas preguntas, lo que nos llevó a crear un campus de verano al aire libre. Nuestro Summer Course, donde los niños no solo juegan y se divierten, sino que además practican inglés de manera natural y sin presión.
Pero eso no es todo… ¿No sería genial que hicieran nuevos amigos fuera de su círculo habitual? Nuestro campus reúne a niños de diferentes lugares, fomentando nuevas amistades y ayudándoles a salir de su zona de confort social.
Además, ¿no te gustaría que estuvieran en contacto con la naturaleza? ¡Nada de estar encerrados todo el día enfrente de una tablet! Aquí corren, exploran y disfrutan al aire libre, respirando aire puro y conectando con el entorno.
¿Y si pudieran además participar de actividades creativas y colaborativas? Desde juegos en equipo hasta cooking lessons y excursiones semanales, nuestras actividades están diseñadas para fomentar la creatividad, el trabajo en equipo y, sobre todo, la diversión.
Suena bien, ¿verdad? Todo eso que te imaginas es posible en nuestro Summer Course y decenas de niños tienen esa oportunidad cada verano. El tuyo podría ser el próximo.
No lo dejes para el último día, contacta con nosotros antes de acabar el mes de mayo y dale a tu hij@ la oportunidad de vivir el verano de su vida. ¡Verás cómo no dejarán de hablar de todas sus aventuras!
